Nos déjamos caer en un pozo sin fondo o creemos que podemos llevar las cosas adelante nosotros sólos,pero más de una vez es sólo una falsa ilusión que nos creamos para no aceptar la realidad de que no podemos afrontarlo solos y que necesitamos ayuda.En el momento menos esperado y cuando comenzamos a sentir que la tormenta ya pasó,escuchar una canción,ver a cierta gente o simplemente pasar por algún lugar particular pueden hacernos revivir sentimientos que creíamos olvidados,como esos vacíos díficiles de explicar,ese sentimiento de soledad aún sabiendo que estamos rodeados de gente que nos quiere,esa mezcla de rabia,desilusión y tristeza,como también así momentos que preferiríamos jamás volver a recordar si pudieramos hacerlo.
Después todos esos recuerdos te vuelan la cabeza y nuevamente uno siente que su vida realmente apesta. Pero hay que saber que no somos los únicos,que todas las personas esconden una historia que quieren contar pero por alguna razón se la guardan,todos tenemos nuestos motivos. Después de que todas esas cosas resurgen del pasado e invaden nuestros pensamientos, sólo nos queda esperar que la tormenta acabe, porque después de ella siempre llega la calma.
Después todos esos recuerdos te vuelan la cabeza y nuevamente uno siente que su vida realmente apesta. Pero hay que saber que no somos los únicos,que todas las personas esconden una historia que quieren contar pero por alguna razón se la guardan,todos tenemos nuestos motivos. Después de que todas esas cosas resurgen del pasado e invaden nuestros pensamientos, sólo nos queda esperar que la tormenta acabe, porque después de ella siempre llega la calma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario